Horno de pizza casero – Calidad y tradición Valoriani – Horno de pizza casero
Valoriani es una historia de calidad y valor que conduce al nacimiento de los hornos de pizzería profesionales.
Valoriani es una fábrica de ladrillos familiar que ya va por su quinta generación, con más de 130 años de experiencia a sus espaldas, y que tiene sus raíces en 1890, en la zona florentina de Figline Valdarno. Aquí Pietro Valoriani funda una fábrica para la producción de jarrones, tinajas y ladrillos refractarios de terracota.
ras el descubrimiento de una excelente cantera de arcilla refractaria, Gino Valoriani, abuelo del actual propietario Massimo Valoriani, decidió trasladar la empresa a Reggello, donde todavía se encuentra la sede de Refrattari Valoriani. Hacia 1940, la demanda de hornos de pan provino de zonas productoras de trigo, como el Bajo Lacio y Apulia. En ese período, Valoriani estuvo a la vanguardia de la contribución al renacimiento de Italia, suministrando sus ladrillos refractarios a las comunidades para la construcción artesanal de hornos.
El punto de inflexión fundamental llega cuando Silvio Valoriani, hijo de Gino, tiene una intuición que marcará el crecimiento futuro de la empresa: «¿Por qué no construimos nuestros propios hornos, para evitar problemas estructurales externos?». Así diseñó Silvio el primer horno de leña prefabricado, con 4 bóvedas entrelazadas.
Aprovechando la experiencia centenaria de la familia en la elección y manipulación de materias primas, diseñó una bóveda rebajada autoportante, utilizando los mismos materiales tradicionales en las mismas proporciones, aumentando la estabilidad, agilizando y simplificando el proceso de montaje de un horno. Esta intuición, implementada con gran creatividad en el período de mayor auge económico de Italia, llevó al nacimiento de los actuales hornos de pizzería domésticos y profesionales Valoriani.
El diseño estructural de la bóveda, perfecto en todas sus proporciones, se mantiene inalterado en la actualidad. Los hornos Valoriani cuentan con decenas de intentos de imitación, pero el primer horno refractario prefabricado del mundo sigue siendo el que tiene la inconfundible V.